RESUMEN:
El mensaje habla sobre la importancia de no tomarse las cosas de forma personal y no darle demasiada importancia a las relaciones complicadas. Se menciona que cada persona tiene libre albedrío y que lo único que se puede controlar es poner el deseo más grande del corazón como prioridad. Se habla sobre cómo el ego se alimenta de lo que pasó y lo que podría pasar, y cómo poner atención en eso puede causar ansiedad. También se menciona la importancia de poner límites a uno mismo en lugar de a los demás, y cómo subir la emoción baja la inteligencia. Se habla sobre cómo el autor y su esposa han aprendido a manejar sus emociones y resolver conflictos de manera más rápida. Se menciona la importancia de tener un lugar sagrado para volver al centro y cómo cada persona encuentra su propia manera de volver a su centro. Se habla sobre la importancia de tomar a Dios como prioridad y cómo eso ayuda a que todo se acomode en las relaciones. También se menciona la importancia de cambiar la percepción acerca de los demás y darle un nuevo significado a las relaciones.
Antes que nada, vamos a reírnos, ¿sale? JAJA JAJA JAJA JAJA 
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¿Por qué me río? Fíjate, me voy a reír por todas las personas que se han tomado las cosas de forma personal, incluyéndome a mí, por supuesto. ¿Cuándo me compartiste tu tema, fulanita? Sí, así te vas a llamar, fulanita. ¿Cuándo me compartiste tu tema? Dije, ¿cómo lo voy a abordar? ¿Desde la seriedad? ¿Desde las caras de nalga? Porque las nalgas son serias. ¿O desde no tomarme nada en serio? Fíjate que las relaciones son en serio demasiado, demasiado complicadas. ¿Por qué? Por una única razón. Cada uno de los seres humanos tiene un libre albedrío diferente. Esto significa que mi mamá, mi esposa, mi hijo y mis hermanos, no están en mi control. Lo único que está en mi control es poner al deseo más grande de mi corazón como prioridad. Y te voy a compartir mi experiencia. No te puedo decir qué hacer o qué no hacer, porque eso sería tonto. No estoy en tus zapatos y no sé realmente qué consejo darte ante esta situación. Lo único que te puedo decir es que no te la tomes tan en serio. El único que está haciendo esta historia en tu mente es el famoso ego. Acuérdate, el ego se alimenta de lo que pasó y lo que podría pasar. Esas miles de historias que tu mente te dice de lo que pasó y lo que podría pasar. Cuando pones tu atención en lo que pasó y en lo que podría pasar, pones tu atención en algo que no puedes controlar. Cuando pones toda tu atención en la culpa del pasado y en la preocupación del futuro, te dan ataques de ansiedad. Sientes que te falta el aire, te duele el corazón. Es lo que me sucedía a mí, antes de que aprendiera a ascender. Ascender significa ir más allá de la mente limitada. La mente limitada llena de programas, llenas de control. Hay un libro que leí recientemente, se llama ¿Quién aprieta tus botones? Y en el libro habla de poner límites a los aprietabotones. Pero quiero que me contestes esta pregunta sinceramente. ¿En tu familia quién es el aprietabotones? ¿Tú o tu mamá? ¿Tú o tu hermano? ¿Tú o quien tú creas que es tu aprietabotones?
A quien hay que ponerle límites es a mí mismo, a esta mente loca que se la pasa haciendo historias entre lo que pasó y lo que podría pasar. Hay una ley que dice cuando sube la emoción baja la inteligencia. Es curioso, antes las discusiones con mi esposa duraban días, sin exagerar, días, cuando apenas me casé con ella nos peleábamos por días enteros. Ahora nuestras peleas duran cinco minutos o menos, porque ahora cuando se nos sube la emoción ya sea a ella o a mí o a los dos, llega un momento en el cual nos cachamos que estamos hablando desde la emoción puras lentejadas, por no decir pendejadas, y en ese momento los dos paramos y nos vamos a hacer lo que en nuestra experiencia nos ayuda a volver al centro, lo que nos ayuda a estar en paz y en amor nuevamente. Cuando yo me voy a mi oficina, porque mi oficina es mi. Mi lugar sagrado. Donde puedo volver a mi centro. Donde hago yoga, donde haciendo, donde. Vuelvo a hacer los ejercicios terapéuticos que me ayudan a liberar las emociones reprimidas, donde pido ayuda a mis maestros. Y ya que vuelvo a mi centro, mágicamente, milagrosamente, vuelvo a mi casa. Y, ¿cuál problema? Ella, a su vez, hace lo que en su experiencia le funciona para volver a su centro. Y los dos volvemos a ser tal cual Dios nos creó. ¿Qué hice yo? Tomar a Dios como prioridad. Para mí Dios son todos los atributos del amor. Responsabilidad, honestidad, fidelidad, inocencia, conciencia, gratitud, apreciación, perdón, compasión, sabiduría, gozo, abundancia, prosperidad, salud, bienestar, etcétera. Cuando pongo como prioridad a Dios, todo se acomoda en mis relaciones y si no se acomoda, pues ¿qué importa? No está en mi poder el comportamiento de mis hermanos. ¿Cuándo mis hermanos van a cambiar? Tal vez nunca, pero lo que sí puedo cambiar es mi percepción acerca de mis hermanos. Una de las cosas que me enseñó un maestro es que no puedo cambiar mi historia de vida, pero sí puedo darle un nuevo significado. Por ejemplo, mi maestro de ascensión un día dijo que mi pareja es mi ángel, que me está mostrando eso que necesito soltar para ser libre. Esa frase me ubica y me ayuda a resignificar la relación que tengo con ella cuando entro en conflicto. Igual con mi papá cuando tenía conflicto con él, empecé a percibirlo como mi más grande maestro, ese ángel que me estaba mostrando lo que necesitaba soltar para ser libre. Y lo que necesitaba soltar es una creencia de control. Y cuando solté el control y lo empecé a amar exactamente como era, curiosamente él cambió para mí. Curiosamente mis familiares que conocen a mi papá me dijeron que mi papá nunca cambió, pero lo más interesante es que para mí sí cambió, porque la percepción que tuve a partir de que elegí paz era diferente.
TE AMO TOTAL Y COMPLETAMENTE
Ananda Ishaya
