Si tú no haces frente a la resistencia con resistencia, esta se disipa de forma espectacular. Simplemente se ablanda. Pruébalo! La próxima vez que alguien te diga: «Yo tengo razón y tú estás equivocado», responde: «Pfftt, tienes razón. Tienes razón. Tienes razón.» Y dilo en serio. En otras palabras, no te burles. No seas sarcástico. Sólo di honestamente: «Tienes razón.» Y luego ve lo que sucede.